miércoles, 9 de mayo de 2012

I


Me gusta que te rías Esecé, o que te quedes con los ojos bien abiertos viéndome y con tu sonrisa.
Me acuerdo cuando te inventé en un poema hace mucho.. Y me acuerdo cuando fuimos a mi casa
y yo me derretía en el suelo viéndote.
Sentía como que me iba hundiendo en el piso, y luego te acercaste y me dijiste que
me metiera en el refrigerador, me tocabas los hombros y te acercabas a mi cara.
Yo me derretía con tu cercanía, sufría mucho por dentro, me enojaba, me cautivabas.

Quería llorar y reír de vergüenza. ¿Acaso era yo la única que te quería dar un beso?
Y luego estábamos escuchando Bjork, y era el amor lo que salía de las bocinas.
Nos reíamos mucho porque sabíamos todo.
Tu sabías,
pero no importa,
yo haré lo que
tu me digas.


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